Hace mucho tiempo que no veía un programa así en la tele... Esperen... ¡Nunca ví un programa así en tele! Una emisión semanal dedicada a los libros! Y en la Tele! Simplemente genial.
Que exista un programa donde los libros son los protagonistas puede parecer impensable en estos tiempos de reality show y programas cuyos títulos empiezan con un gerundio, que servirá de pretexto para puterio farandulero (para los que no saben que es un gerundio, les doy ejemplos: Bailando... Cantando... Patinando).
Sin embargo existe, TELEFE lo tiene y va todos los Domingos, a la medianoche, con la actuación/conducción de Juan Sasturain, reconocido periodista y escritor.
Ver para leer no es una ficción, ni tampoco un programa periodístico o documental, sino una fusión de generos. En esta especie de híbrido a Juan se le presenta un problema cotidiano (desde un cumpleaños hasta una invitación extraña), que él intenta solucionar a través de la literatura.
De todas formas, Sasturain no es sólo un hombre de letras, su trayectoria está vínculada estrechamente al mundo de la historieta y el humor gráfico; en la actualidad es el director de la mítica Fierro, que ha vuelto a editar Página/12. Quizas es por esa filiación con el mundo de viñetas garabateadas que la escenografía del programa está dibujada. Mejor dicho, delineada con fuertes trazos de lapiz negro sobre un fondo blanco.
Pero ese no es lugar donde la acción se desarrolla; allí sólo se plantean los problemas en una suerte de monólogo o en una charla imaginaria con un psicólogo (en realidad sólo vemos sus piernas). Es en las viejas librerias, en la calles, en los bares y en las charlas con otros escritores donde los conflictos se resuelven, siempre, pero siempre, por medio de la literatura.
He leído en algunos blogs críticas en torno al horario. Algunos argumentan que el programa no le importa al canal por eso lo pone el domingo a las 00:00, pero he aquí una gran contradicción... Antes de ver para leer está GH Famosos, el nuevo titán de TELEFE, con 35,2 puntos de rating en su primera gala. Entonces, excepto que mis cálculos sean ilógicos o que haya un apagón masivo o que los televidentes sufran un infarto colectivo, un gran porcentaje de personas hereda la propuesta cultural de Sasturain y se prende con el programa.
Dicho y hecho: ¿En que otro horario y día podría un programa dedicado a libros hacer 11.2 de rating en su segunda emisión? Más de un millón de personas lo vieron! No creo que esa haya sido una decisión desacertada, todo lo contrario: un lugar estrátegico y (ojala) una apuesta a futuro.
Celebro el programa, sus secciones (Mesa de saldos, Amo mis libros, y Libros y Libritos) y su estilo informal, que despoja al mundo de los libros (y la literatura) de esa atmósfera snob que, muchas veces, se le adjudica; en gran medida por la personalidad de los clásicos como Borges, para dar un ejemplo.
Ver para Leer, un programa que mezcla lo mejor de la tele con la pasión por los libros; mi nuevo clásico de los domingos que seguiré como hincha fanático de los libros que soy!
Adio!
Que exista un programa donde los libros son los protagonistas puede parecer impensable en estos tiempos de reality show y programas cuyos títulos empiezan con un gerundio, que servirá de pretexto para puterio farandulero (para los que no saben que es un gerundio, les doy ejemplos: Bailando... Cantando... Patinando).
Sin embargo existe, TELEFE lo tiene y va todos los Domingos, a la medianoche, con la actuación/conducción de Juan Sasturain, reconocido periodista y escritor.
Ver para leer no es una ficción, ni tampoco un programa periodístico o documental, sino una fusión de generos. En esta especie de híbrido a Juan se le presenta un problema cotidiano (desde un cumpleaños hasta una invitación extraña), que él intenta solucionar a través de la literatura.
De todas formas, Sasturain no es sólo un hombre de letras, su trayectoria está vínculada estrechamente al mundo de la historieta y el humor gráfico; en la actualidad es el director de la mítica Fierro, que ha vuelto a editar Página/12. Quizas es por esa filiación con el mundo de viñetas garabateadas que la escenografía del programa está dibujada. Mejor dicho, delineada con fuertes trazos de lapiz negro sobre un fondo blanco.
Pero ese no es lugar donde la acción se desarrolla; allí sólo se plantean los problemas en una suerte de monólogo o en una charla imaginaria con un psicólogo (en realidad sólo vemos sus piernas). Es en las viejas librerias, en la calles, en los bares y en las charlas con otros escritores donde los conflictos se resuelven, siempre, pero siempre, por medio de la literatura.
He leído en algunos blogs críticas en torno al horario. Algunos argumentan que el programa no le importa al canal por eso lo pone el domingo a las 00:00, pero he aquí una gran contradicción... Antes de ver para leer está GH Famosos, el nuevo titán de TELEFE, con 35,2 puntos de rating en su primera gala. Entonces, excepto que mis cálculos sean ilógicos o que haya un apagón masivo o que los televidentes sufran un infarto colectivo, un gran porcentaje de personas hereda la propuesta cultural de Sasturain y se prende con el programa.
Dicho y hecho: ¿En que otro horario y día podría un programa dedicado a libros hacer 11.2 de rating en su segunda emisión? Más de un millón de personas lo vieron! No creo que esa haya sido una decisión desacertada, todo lo contrario: un lugar estrátegico y (ojala) una apuesta a futuro.
Celebro el programa, sus secciones (Mesa de saldos, Amo mis libros, y Libros y Libritos) y su estilo informal, que despoja al mundo de los libros (y la literatura) de esa atmósfera snob que, muchas veces, se le adjudica; en gran medida por la personalidad de los clásicos como Borges, para dar un ejemplo.
Ver para Leer, un programa que mezcla lo mejor de la tele con la pasión por los libros; mi nuevo clásico de los domingos que seguiré como hincha fanático de los libros que soy!
Adio!
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