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Generalmente ver un partido de tenis me aburre. Hasta hoy, jamás había mirado un partido por completo, pero Willy Cañas tiene eso que me puede.
Hoy no me importo estar dos horas y media pegado a la pantalla, expectante en el primer set, puteándo en el segundo y sacado en el tercero, revoleándo la remera al final. Hasta me banque los comentarios de tenis de Javier Frana, siempre con esa terminología tan particular del deporte, que aclaro no entiendo un carajo (como top spin por ej.).
Guillermo le demostró al N°1 del mundo, que lo de hace dos semanas no fue sólo suerte, sino tenis con huevo! Mucho huevo! Cuando estaba abajo 3-1 en el tercero parecía que el camino de Roger al triunfo era liso, llanamente un trámite. Pero nunca tenes que dar por muerto a Cañas...
Una sanción injusta por un doping inexistente casi lo deja afuera de las canchas, pero no se rindió y ahora es la bestia negra (como lo llaman en Marca) del circuito. Willy Cañas, un grande, como tenista y como tipo... Hoy el único que puede ganarle a Federer, uno de los mejores tenistas de la historia!
Adio!
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