No-Noticias
"Si te gustó la fiesta bancate la resaca". Eso dice una vieja frase que se repite, hasta el hartazgo, al día siguiente de una fiesta descontrolada, donde el exceso de chupe sobrepasa los límites que el bocho puede aguantar.
Si a este panorama de fiesta le sumamos drogas, más alcohol y el descontrol de haber visto un partido en la TV con la muchachada, el cóctel es explosivo. Un tsumani de migraña ataca el cerebro, al otro día.
Esas son fiestas en las que, quieras o no, algo de tu casa se rompe, siempre dando por sentado que la party la organizaste vos. Una vaso, algún platito, si es que comieron pizza, o algún que otro respaldo de una silla, son los blancos más comunes para la andanada agresiva y ampulosa de una fiesta extrema.
Por eso, siempre antes de armar un fiestón, un hombre precavido guarda en lugares seguros los elementos preciados, para que nada malo les ocurra. Este no fue el caso de Alan Stirling, un flaco que mató a su amigo, cuando descubrió que le había roto su nueva Play 3!
Alan... ¿Cómo coño vas a dejar la Play 3 en el medio de una fiesta de tamañas magnitudes?
La cosa fue así: se juntaron con birras, fútbol en tele y mucha frula-la (drogas), se descontrolaron, Alan se fue a dormir del pedo que tenía pero la fiesta seguía. Cuando se levantó, fue a un habitación y su amigo Paul Mcdonall yacía borracho, durmiendo en el piso. El dueño de casa, al ver tanto pandemonium, echó a todos a la mierda. Cuando volvió, suspiró de tranquilidad, pero... vió su nueva Play 3 destruída en el piso y salió en buscar del culpable. Al encontrarlo durmiendo en un pasillo, lo cago a palo y lo mató.
Alan, borrachín... Si te gustó al joda bancate la resaca! La rotura de la play 3, ¿será un atenuante?
Link
Lo asesinó por haber roto su PlayStation 3
Adio!
No hay comentarios.:
Publicar un comentario