(Foto tomada con mi celular en Edificio de Perfil)
Algo huele mal en Perfil... Los trabajadores del diario, propiedad de la familia Fonteveccia, están hace 22 días en paro, reclamando una suba salarial: 500 pesos de aumento y un piso salarial de 1.500 pesos, retroactivo a enero.
El periodismo puro implica el compromiso de contarle a los lectores no sólo lo que pasa en el país y el mundo, sino también lo que ocurre al interior del diario. Un ejemplo fue la cruzada contra la discriminación de la publicidad oficial (recordemos los medios del Grupo Perfil no reciben ingresos del estado en concepto de pauta publicitaria), que precipitó la creación de un fideicomiso destinado a ayudar al dominical economicamente. El evento se celebró con bombos y platillos, conferencias de notables periodistas (Lanata y Eliashev,por ej.), y amplias notas en el diario explicando el porqué del fideicomiso.
Una manera de hacer periodismo puro es informando lo que pasa y comunicando lo que nos pasa. La Real Academia Española define al adjetivo puro como "algo que procede con desinterés en el desempeño de un empleo o en la administración de justicia" y también como "algo libre y exento de imperfecciones morales". Hasta hace poco, Perfil cumplía su promesa de "Periodismo Puro", hoy eso está en duda. ¿Por qué dejó de lado este compromiso con los lectores?
Las noticias sobre el conflicto, a diferencia del manifiesto para el fideicomiso, no salen en el cuerpo del diario. En la edición del 18 de Marzo, sólo Nelsón Castro, Ombudsman del Perfil, en su sección Correo Central, informó sobre el paro, a través de unas breves líneas y la publicación de dos cartas sobre el reclamo; una de Magdalena Ruiz Guiñazu, otra de la Asamblea de Trabajadores de Perfil.
Elblog de la Asamblea plantea un lema: Perfil no es periodismo puro, sino "Periodismo Pobre". Pobre es alguien "necesitado, que no tiene lo necesario para vivir"; los trabajadores de Perfil no buscan aumentos para despilfarrar en lujos, para tener una vida ostentosa. Sólo reclaman lo que consideran justo, un periodista explotado y mal pagado, no es un periodista feliz...
Sin buenas condiciones de trabajo, sin trabajadores conformes con sus sueldos, el "Periodismo Puro" es, simplemente, la fotocopia borrosa de un discurso (doble)basado en la "ética", una mentira blanca detrás de las rotativas.
Leo Perfil casi todos los domingos, me gusta el diario, su propuesta y su talante. Es más, ahora estoy realizando un curso de su Fundación... Por eso, sinceramente, espero que todo se solucione de la mejor manera, para que este buen proyecto editorial no muera por segunda vez, a causa de la negligencia de sus dueños.
Adio!
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