viernes, septiembre 03, 2010

Mear afuera del tarro

En su impulso por cerrarle el camino a cualquier tipo de interpretación de la historia que no sea la propia, el Gobierno mea afuera del tarro. Sus voceros habituales, que cada día se parecen más a una barra brava de gritones de incoherencias, agregan cada día un nuevo disparate a la lista de "kirchnerismos", que en algunos años generará risas al unísono. Entre ellos, el más destacado, el alumno ejemplar, sin lugar a dudas, es el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández. Hoy, el verborrágico funcionario tuvo un nuevo destello: dijo que el fiscal del juicio a las Juntas Militares, Julio César Strassera, “maltrató a los detenidos” durante la dictadura y lo acusó de querer presentarse ahora como “el abuelito de Heidi.

El otro día por cuestiones laborales me tocó revisar, uno por uno, todos los ejemplares del Diario del Juicio, una publicación que la editorial Perfil sacó durante el histórico proceso judicial. A través de él pude empaparme del trabajo de Strassera, a quien sólo conocía por nombre y por habérmelo cruzado en algunos actos de Raúl Alfonsín. Por eso me indigna que tipos como Aníbal Fernández y Osvaldo Papeleo, este último con vínculos sin aclarar con la Triple A de López Rega, salgan a denostar a alguien que tuvo los huevos bien puestos cuando había que tenerlos, como fue Strassera.

La foto que ilustra este post da cuenta de eso. Strassera junto a Moreno Ocampo en el juicio que marcó un antes y un después en la historia del país, ambos hablando con una madre de Plaza de Mayo, que pareciera ser Hebe de Bonafini. ¿Secundará Hebe las palabras de Papaleo y Aníbal F.? Todavía no se la escuchó. Habrá que ver. Por lo pronto, me queda una sola reflexión. Mientras este tipo, el abuelito de Heidi, acusaba a los genocidas, otros hacían guita rematando propiedades en el sur. "Para hacer política primero hay que hacer guita", era su razonamiento. No sé si era el caso de jefe de Gabinete, espero que no. De todas formas, está desbocado y dice cualquiera. Y lo peor: se nota.

Adio!

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