En política, hay que embarrarse las patas. Tengo muchas cosas para criticarle a la Presidenta, pero lo que hoy hizo, ese gesto de bajarse del avión de España e irse a Tartagal, merece mi entero reconocimiento. Hoy Cristina se embarró las patas, abrazó a los necesitados, les llevó esperanza. La persona más poderosa del país los escuchó y les dio la ilusión -esperemos que real- de un mañana mejor. Dejo de lado la soberbia y vivenció desde el llamo el desastre y el horror de los desastres naturales. ¿Cambiará de opinión en su decisión al veto de la Ley de Proteccion de Glaciares? ¿Dará el O.K. para la reglamentación de la Ley de Bosques? Ojala. Puede haber política detrás, una motivación electoral, pero hoy yo vi a una mujer preocupada por saber cómo estaban los demás y eso me gustó.
3 comentarios:
Eso es lo que no hace casi nadie en la oposición, lo que explica los resultados oficialistas en las elecciones, y lo que mucha gente no quiere entender.
Buen post y buen viaje, Payito.
Pero Payi, para eso no es necesario venir hasta acá, cualquiera de los que vivimos en este lugar podíamos explicárselo (como ella misma dijo en los reportajes).
Acaso hasta ayer no se había percatado de la pobreza del norte del país?
Tartagal es la ciudad más bella desde Salta hasta Salvador Mazza, le llaman "La Perla del Norte", no es fácil imaginarse lo que son las otras.
Yo otra vez... No lo creo.
Si muy buena la actitud, aqui en el interior los politicos siempre se arremangan, no hay otra manera de pelearle a la "pobreza estructural" eso si habia que embarrarse para tapar a los diarios del dia siguiente donde saldrian los tres peronistas disidentes juntos (macri, Narvaez y Sola).- de otra manera no se comprende "el tigre pierde el pelo pero no las mañas"
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