Argentina me da miedo

Las viejas antinomias que dividen a la sociedad se reavivaron por la guerra de la soja y ahora no hay vuelta atrás. Todo es ellos o nosotros, nosotros o ellos. La lógica del amigo/enemigo en su estado más puro es la que reina en las conversaciones, miradas y gestos que se ven. Que si aquel no cree que aerolíneas debe ser re-estatizada a como de lugar es porque de seguro tiene sangre de oligarca, o que tal otro confía en las buenas intenciones del gobierno es un comprado. De los dos lados se escucha los mismo: "Y a ese quién le paga", como si las ideas sólo fueran rentadas por un Otro maligno. En el medio, pocos ven (o nadie ve) las similitudes entre la virulencia ciega de ambos bandos. Y el que las ve es, siendo suaves, tildado de "contra", o siendo realistas de "reverendo hijo de puta" por marca con lucidez lo que pocos ven. La Hebe de la actualidad es igual de violenta que la Pando, que nunca cambió y siempre fue una defensora de asesinos. Esto no quiere decir que son lo mismo, ni mucho menos. ¡El reduccionismo es parte de la lógica binaria del odio argento en boga! No es una cuestión de contenidos (la lucha de las Madres es loable y la de Pando y cia., detestable), sino de maneras de hacer, de estilos que en nada ayudan a construir un mejor país. Todo eso, me da miedo.

Adio!