jueves, septiembre 27, 2012

Preguntas, respuestas y mentiras

La presidenta Cristina Fernández de Kirchner volvió a responder preguntas en conferencia de prensa. Ocurrió a miles de kilómetros de Argentina. El lugar elegido fue la universidad de Georgetown, en el marco de la inauguración de la cátedra argentina en esa casa de estudios. Los entrevistadores fueron alumnos universitarios. Y sus preguntas incomodaron a la jefa de Estado, que no tuvo problemas en mentirles, diciendo que hablaba siempre con la prensa, cuando en realidad su gestión se caracteriza por un férreo cerrojo a las preguntas incómodas.



Sincera como siempre, CFK dijo que "en realidad hablar hablo todos los días, con la prensa hablo muchísimo cuando voy a actos, me entrevistan. Lo que sucede es que en la Argentina no hablar con la prensa es no decir lo que ellos quieren escuchar, me parece que hay una gran diferencia". Así fue el pregunta-respuesta textual de ayer:

Pregunta: Gracias por haber venido Presidenta. Tengo una pregunta muy simple para hacerle. Por qué nosotros los estudiantes en Georgetown tenemos la oportunidad de hablar contigo cuando en Argentina usted no habla con la prensa por muchos años.

Respuesta: No es así. En realidad hablar hablo todos los días, con la prensa hablo muchísimo cuando voy a actos, me entrevistan. Lo que sucede es que en la Argentina no hablar con la prensa en no decir lo que ellos quieren escuchar, me parece que hay una gran diferencia. Cualquiera que vaya a alguno de los actos políticos a los cuales voy en el Gran Buenos Aires o en el interior del país… no hablo siempre, es cierto, no hablo todos los días, pero si periodista me pregunta le respondo. Es cierto que a algunos periodistas no les gusto cuando no les respondo lo que ellos quieren, pero es parte de la libertad del que pregunta y es parte de la libertad del que responde. Además te puedo asegurar que cuando se hacen preguntas en algunos ámbitos… y es mentira eso de hace años, he hablado muchísimo con periodistas acreditados en la Casa de Gobierno permanentemente; no lo hago a través de regulares y cada 15 ó 20 días conferencias de prensa. Me gustaría que asistieras a alguna conferencia de prensa en la República Argentina donde cuando a algún periodista no le gusta algo empieza a gritar y hacer escándalo y cosas que realmente…, no todos, pero le ha tocado a algún ministro por ejemplo ser respondido en la sala de conferencias de la Casa Rosada. Y lo veo a Obama cuando da conferencias, el periodista pregunta, el Presidente responde y allí termina, allá si no les gusta la respuesta que vos das gritan, se enojan, patean una puerta, una vez nos patearon una puerta en la Casa de Gobierno en la sala porque no les gustaba la respuesta que habían dado. Un cronista de un prestigioso diario, de un diario centenario, no vamos decir prestigioso, centenario. Tiene el mérito de tener más de 100 años, pero en realidad si por ejemplo pudieran desarrollarse en un marco de respeto normal como se desarrollan en todo el mundo, seguramente. Pero me parece que los gobernantes no estamos para responder o para hacer un centro de nuestra gestión las conferencias de prensa. De repente yo creo que algunos periodistas creen que en realidad es más importante el entrevistador que el entrevistado o que la gestión de un gobernante es contestar a la prensa, en realidad lo que debe hacer un gobierno es garantizar la publicidad de los actos, que es obligatorio, y además fundamentalmente también una prensa en la que muchas veces no sucede lo que sucede en Estados Unidos donde la prensa dice claramente con qué se alinea. Por ejemplo yo me acuerdo en la campaña de Obama del Washington Post, del New York Times, que dijeron a sus lectores que ellos apoyaban la campaña de Barak Obama. Y en realidad me parece que es muy bueno que cada medio de comunicación explicite ante sus lectores, sea un medio escrito o audiovisual, que tiene determinada posición, que apoya a menganito o fulanito, porque hace a la defensa del que lee, el que lee que el que está escribiendo está apoyando determinada ideología, determinada candidatura, determinada gestión. Esto en mi país no sucede, vos hablás con los periodistas y son todos independientes. En realidad son independientes de los reyes de España, porque no hay periodismo independiente en el mundo, nadie es independiente en el mundo. Vos mirás el mundo desde un lado, sos de Michigan, sos americano, tenés una visión, te gustarán los demócratas, te gustarán los republicanos, te gustará el Tea Party, en fin, la mirás de algún lado, no podés decir que sos independiente, porque además decir que sos independiente es casi como decir algo soso e insulso, no tengo ideas, no tengo un lugar de donde miro. A mí lo que me gusta de la prensa norteamericana es que la prensa norteamericana, por lo menos la más seria, la más conocida, se pronuncia claramente a favor de tal o cual candidato, no se presenta como independiente y objetiva. En mi país tampoco hay prensa independiente y objetiva, más, si uno mira y puede leer los portales no debe haber habido una presidenta y digo presidenta con a, porque soy mujer, una presidenta que haya sido más descalificada, más insultada y más agraviada que esta presidenta. Sin embargo esta presidenta fue la que envió el proyecto de eliminar el delito de calumnias e injurias para los periodistas. Antes en mi país si un periodista era condenado penalmente por calumnias e injurias por algo que había escrito en ejercicio de su profesión podía ser llevado preso, fui yo la que envié al Parlamento el proyecto de ley para derogar este delito de modo tal que cualquier periodista pudiera decir lo que quisiera, fuera verdad, mentira, insulto o agravio y no fuera preso por eso. Sí obviamente responda, si ha causado un daño, económicamente, pero no con su libertad. Así que yo te invitaría, Gabin, te invito un día a que me acompañes a la Argentina y que vengas a una conferencia de prensa, vas a entender todo tan rápidamente que te vas a dar cuenta de cómo viene la mano. ¿Cuándo habla Cristina con la prensa? ¿Cómo son esos encuentros con el periodismo? ¿Qué preguntas se le hacen? En el canal de YouTube de la Casa Rosada hay algunos ejemplos. El 2 de agosto, después de participar en un acto por el 158º aniversario de la Bolsa de Comercio, este fue su cruce con los medios:

 

¿Preguntas? Una sola, de canal estatal (u oficialista) sobre política internacional, nada espinoso, ni molesto. Un centro al área chica, para utilizar una metáfora futbolística.

El 9 de agosto, tuvo otro "encuentro" con periodistas después de inaugurar la nueva planta de Hidroesulfuración de gasoil de YPF en Ensenada.


¿Preguntas? Casi todas las hace y las responder Cristina. El único cruce con un periodista fue, otra vez, un pase de gol. "Presindenta, un mensaje para los trabajadores de la región...".

Aquel día, en el que pidió un Tribunal de Ética para los periodistas, la charla siguió en otra parte de la planta de Ensenada. Esta vez con CQC modelo 2012, alejado de la ironía y capacidad crítica del viejo programa, como único interlocutor.



¿Preguntas? Sí, de nada. La única oportunidad en la que participaron varios cronistas, lo más parecido a un cruce con los periodistas, fue cuando, sin querer, la Presidenta dijo la "víbora", palabra que trae mala suerte para los cabuleros. Increíble, pero real: se debatió como ahuyentar esa mala suerte tocando algo de madera y sin patas.

El 25 de julio, Cristina tuvo, quizás, uno de los más extensos mano a mano con un periodista desde que renovó su mandato en 2011. Fue, como era de esperarse, con el notero de CQC, Pablo Camaití.


Todo, en un tono humorístico. Ese periodista, hace poco tiempo dejó CQC y hoy es la cara del nuevo noticiero de la medianoche de la TV Pública, producido por La Cámpora.

Ayer, CFK tuvo su último contacto con la prensa hasta ahora, tarde argentina, en la que me senté a escribir esto. De muy buen humor después de una reunión en el BID, se acercó a los periodistas que cubren su gira para agradecerles.


¿Preguntas? Ni. Depende de cómo se la mire. Una sola. Sí, otra vez, un penal sin arquero, ni signos de interrogación. "Pasar del consenso de Washington a una cátedra argentina en Washington... alguna reflexión al respecto". Risas de Cristina. Carcajadas. Felicidad. Gol. 

Así son los diálogos de Cristina cuando habla con la prensa. La mayor parte de las veces, solo micrófonos dispuestos a captar el audio de una Presidenta que se pregunta y responde sola. 

Por eso lo de ayer en Georgetown fue tan increíble. Había personas que preguntaban, no tiraban centros, y una jefa de Estado que respondía, aunque sea con algunas mentiras.

Adio!

lunes, septiembre 24, 2012

Guerreiro: "No se puede ser buen periodista si uno no lee"


























–¿Qué consejo le daría a un recién licenciado en Periodismo? 
–La verdad es que no me gusta dar consejos porque creo que la fórmula le sirve a cada uno. Lo contrario puede producir en el otro una idea anuladora y así se han reventado contra la pared muchos talentos. De todos modos, no creo que se pueda ser un buen periodista si uno no lee, si uno no alimenta su prosa, si no va al cine, si no alimenta su manera de ver el mundo. Un periodista es, ante todo, alguien que tiene una mirada; si no tienes una mirada, no tienes nada. Uno no es periodista por un lado y persona por el otro, uno lleva puesto lo que es todo el tiempo, sobre todo en una profesión así.

Leila Guerreiro, en una entrevista con ABC de España.

Adio!

miércoles, septiembre 19, 2012

Jacobo Timerman: "Yo soy la nada"


Ayer terminé de leer la enorme investigación biográfica que hizo Graciela Mochkofsky sobre Jacobo Timerman (un libro que todo periodista debe leer por lo menos una vez en su vida). Casi al final del libro, después de deconstruir la vida del periodista que fundó La Opinión y revolucionó el periodismo gráfico en el país, Mochkofsky cita una entrevista del diario La Nación de 1996 que le hicieron a Timerman en La Dacha, su casa de Punta del Este, en el ocaso de su vida, tras la muerte de su esposa. El titulo es devastador: "Yo soy la nada"
Comparto una parte porque Timerman es el espejo en el que muchos periodistas de hoy con poder  deberían mirarse: 


-¿Por qué eligió este lugar para vivir?
-Hace años que veníamos aquí con mi mujer. Antes, sólo en el verano. Los dos teníamos la idea de retirarnos acá. En Buenos Aires no podíamos. En esta casa murió ella, hace cinco años. Yo me retiré de todo. Y me quedé.
-¿Cómo se llega a la decisión de dejarlo todo?
-No hay un momento exacto. Viene lentamente. La muerte de mi mujer me produjo un colapso psicológico muy grande. Estuve en tratamiento mucho tiempo. Poco a poco fui deshaciéndome de todo lo que había sido en el pasado y llegó de pronto el deseo de quedareme acá. Me siento más en paz. Yo no hubiera podido soportar otra cosa sin Risha.
-¿Qué fue ella?
-Todo. No sólo mi esposa. Era mi amiga, mi amante, mi compañera.
-¿Piensa mucho en el pasado?
-Trato de no hacerlo. Le tengo pánico a la nostalgia. No quiero obsesionarme. No quiero pasarme la vida persiguiendo fantasmas. Aunque uno muchas veces se encuentra pensando algo sin habéserlo propuesto.
-¿En qué piensa con más frecuencia?
-En la vida con mi mujer. La extraño. A veces no me doy cuenta de que ya no está y la busco para comentarle algo. Al principio fue terrible. Fueron años durísimos. Después, poco a poco, fui saliendo.
-¿Habla de esto con sus hijos?
-No están acá. No comparto estos pensamientos. Yo sigo siendo lo que fui para ellos como padre y ahora también como abuelo.
-¿Cómo es que un hombre acostumbrado a la pelea cae en una depresión?
-No tiene nada que ver. Hay una parte que es lo que uno es en el trabajo. Pero es una porción muy chica. En realidad, necesito el ámbito familiar. Me da fuerzas. Sin eso, se pierde el soporte.
-¿Nunca viene nadie?
-A veces, en el verano, llega algún amigo. Pero, por lo común, estoy aislado. No me integré a la comunidad geriátrica de esta ciudad. Son todos retirados que juegan al bridge. Y yo sólo juego al truco. Jugué horas en la cárcel. Me gusta con locura. Pero queda mal jugar al truco en Punta del Este.
-A lo mejor, usted lo impone y es un éxito.
-Ya no impongo nada. Ya no dirijo nada. No trato de influir. Recibo muy pocas visitas.
-¿Y no le gustaría?
-Lo único que puedo decir de mi vida es esto. A veces pienso en la posibilidad de conversar. Me gustaría. Pero no se me dio.

-¿Ni siquiera con viejos amigos y colegas?

-¡Noooo! Yo pienso más en intelectuales. Pero no se da.
-¿Le gusta hablar por teléfono?
-No, lo hago muy poco. Es muy raro que llame alguien. Salvo mi hijo, el que vive en Buenos Aires. Y, con menos frecuencia, con los otros dos. Así se dieron las cosas.
-¿Puede pasar un día entero sin hablar con nadie?
-A veces, en una semana pronuncio 20 o 30 palabras, nada más.
-Muchos dicen que usted tiene mal genio, casi intratable.
-¿Es una pregunta o una afirmación?
-Tómelo como prefiera.
-Si quiere saber, el mal carácter es sólo en el trabajo. Estoy enamrado del periodismo y por eso pongo tanta pasión. Y algunos lo toman como mal genio. Pero yo no soy así en la intimidad.
-Romper el original de un periodista en medio de la Redacción y delante de todos sus compañeros, como se cuenta de usted, ¿qué es?
-La historia es cierta. Pero eso es el trabajo. Y el original en cuestión era impublicable. Un profesional puede traer una nota de mejor o peor calidad. Pero a la hora del cierre, una nota impublicable es algo que no se puede aceptar. Y yo no la acepté.
-¿Qué hace en todo el día?
-Leo. Pienso. Escucho música. Cuando puedo, veo una buena película de video. Soy fanático del cine. Me levanto al mediodía.
-Eso no suena mal.
-¿Es una opinión o una proposición...?
-Una opinión. Dígame más.
-Tomo unos jugos, almuerzo liviano y voy a buscar los diarios. Siempre leo La Nacion y Página 12. Me acuesto. Leo mucho acostado. Siempre tengo tres o cuatro libros. Ahora estoy con unos escritos de Italo Calvino, en París, que acaban de editarse. También, con el último libro de Paul Auster y con unos escritos de Primo Levy.
-¿No escribe?
-No. Nada.
-¿Nunca piensa en volver?
-A veces si. Va a creer que quiero congraciarme, pero eso me pasa, por ejemplo, cuando veo los cambios en La Nación. Es fantástico.La creatividad me entusiasma. Pero estoy cansado.
-¿Ningún proyecto?
-Primo Levy era un autor italiano, sobreviviente de los campos de concentración de Auschwitz,que se suicidó hace unos años. El dijo una vez: ¿Quién dice que los muertos no tienen voz y no hablan? Esa frase me dio la idea de escribir un libro que se llamara Los tres hijos de Sofia, que son los tres hijos de René Epelbaum, que desaparecieron. Y de contar la historia en primera persona, como si yo fuera el hijo mayor que relata la tragedia. Mi mujer no quería que lo hiciera. Decía que eso abriría puertas a una serie de cosas que nos han ocurrido en nuestra familia. Cada tanto me vuelve la idea.
-¿Y ahora? 
-No, no creo que lo haga. Llegué a visitar la casa de la familia Epelbaum. Está todo igual. No, todo no. Se nota el tiempo. Eso me crea angustia.
-¿No escribe por angustia?
-No puedo explicar todo. No siempre se sabe por qué ocurren las cosas.No tengo una explicación de por qué vivo así. Mi vida es la nada. Y la nada no se puede compartir.
Adio!

miércoles, septiembre 12, 2012

Los militantes según Juan Manuel Abal Medina


"Militantes o activistas: constituyen la base real y permanente de la organización partidaria, su 'nucleo duro'. Su actividad es cotidiana y se sienten fuertemente comprometidos e identificados con la organización. En algunos casos pueden recibir una retribución material por su tarea; por ejemplo: un empleo en el sector público o en países débilmente institucionalizados alguna prestación como planes sociales, ayudas alimenticias o algún tipo de beca o subsidio".
Juan Manuel Abal Medina, Los partidos políticos: ¿un mal necesario?, Capital intelectual, Buenos Aires, 2004, p.19.

La pregunta que me viene a la cabeza es: en qué categoría de país se encuadra a la Argentina del año 2012. ¿Qué dicen?

Adio!

jueves, septiembre 06, 2012

6,7,8: lo emergente, lo residual y el riesgo de los fanatismos

Fanático, ca. (Del lat. fanatĭcus). 
1. adj. Que defiende con tenacidad desmedida y apasionamiento creencias u opiniones, sobre todo religiosas o políticas. 
2. adj. Preocupado o entusiasmado ciegamente por algo.

El modelo tiene grietas. Pueden verse en la economía, con funcionarios como Ricardo Echegaray pidiendo que se veranee en el país cuando él prefiere el sol de Punta del Este. En la política, cuando Hugo Moyano, el principal aliado del kirchnerismo se convierte de un día para otro en la suma de todos los males porque se queja de que Cristina, la Presidenta, no lo atiende. Y también aparecen, por momentos fugaces, en la televisión, por ejemplo en 678, el programa insignia del periodismo kirchnerista.

Ayer, una de esas grietas se desnudó en canal 7, cuando el septuagenario Orlando Barone increpó a Cynthia García, en medio de un debate sobre periodismo en torno a un informe sobre Jesús Cariglino, barón del conurbano e intendente de Malvinas Argentinas. Fueron apenas unos segundos en los que la "sintonía fina" que siempre ejercen con fruición los panelistas para elogiar al Gobierno se quebró.
García no dijo nada desubicado, ni fuera de lugar. Su pecado fue haber proferido la siguiente frase: "A mí me parece que somos periodistas ejerciendo el periodismo".

García no quería obviar el tema de la importante pauta que tiene Cariglino en distintos programas. Barone prefería obviarlo. Hablar de pauta en un programa oficialista cuando el Gobierno la usa para premiar y castigar, podría ser malinterpretado, quizás pensó. Lo cierto es que de un momento a otro, Orlando se transformó y se disparó el siguiente cruce:

Vos no tenes que decir "somo periodistas"... ¿Quien sos vos para decir que somos periodistas?– la paró moviendo la mano, como si retara a una niña y subió la voz– ¡Pero yo no puedo creer que vos te asumas ante un tipo de 74 años... "Yo soy periodista".
¿Te estás peleando conmigo?
Es decir, ¡yo soy persona! ¡Hace 74 años que soy persona!
¿Te estas peleando conmigo al aire? ¿Querés discutir conmigo?
No, dejalo hablar a Mocca. 

 

La discusión continuó y Barone intentó minimizar las opiniones de su colega de panel –se sientan uno al lado del otro– deslegitimando sus argumentos, diciéndole que Mocca, soporífero como siempre, era un profesor respetado cuya palabra tenía más validez. Hubo tensión y por momentos se notaba cómo Barone miraba detrás de cámara, con un gesto adusto.


El episodio disparó todo tipo de reacciones. En su Facebook, Cynthia García recibió mensajes de solidaridad con palos a Barone. Los seguidores de 678 le dijeron las siguientes frases:
  • Cynthia toda mi solidaridad, y comparto plenamente lo que decís, Barone es un desubicado. 
  • Bravo Cynthia!!! Estoy viendo 678.Tus intervenciones son excelentes. Coincido totalmente 
  • Cynthia te rebanco, que bien sabes defenderte y Barone se desubico mucho no me gusto para nada como te trato, ultimamente esta bastante gaga..Como se nota que sos de la escuela de Victor Hugo.
  • Un grosero desubicado Barone!!.....SOS GROSA Cynthia!!!!, tenes un pensamiento muy agudo!! un gusto que estés en 678
  • Cynthia vos tenés razón y tenes buen estilo, y no mereces lo que Barone, en un exabrupto, te dijo. No sos la "vedette", otra lo es (¿Que les pasa con la producción ¿por qué no lo hablan?)
  • Yo estaba más de acuerdo con Mariana y con Mocca, pero me pareció buenísima la discusión, lástima que Barone lo embarró con agresiones personales. Encima Mariana le dijo que a ella la enriquecían los argumentos de Cynthia, y con eso le tapó la boca. Si sigo mirando 678 es por la riqueza de los panelistas nuevos, si no ya estaría caduco. 
  • Cynthia,yo te banco, Barone te tiene que pedir disculpas, cree que tener años le da chapa; pero es soberbio y grosero, que lo jubilen que está gagá y no soporta tu inteligencia y juventud. –Mepa que todos los del panel te tienen celos Cynthia, sos grosa seguí asi...
  • Quería decir algo , pero ya lo dijeron todo. El pueblo y la militancia te ama Cynthia. Seguí siempre asì !!! 
  • Aguante la vedette Cynthia!!! :P No nos queda otra que disculpar a Don Orlando, está algo senil, no comprende y le salta la térmica mal. 
  • Creo que el tiempo de Barone termino, demostró como lo viene haciendo hace rato que es un irrespetuoso maleducado, el programa baja mucho el nivel con semejantes comentarios tanto de el, como de Barragan , no entiendo como todavía la producción no se da cuenta, que muchos de los televidentes tenemos que cambiar cuando opinan ellos. Te banco a muerte, aunque en algunos de tus comentarios no coincidamos.
García acusó el golpe de Barone y le agredeció el afecto a sus seguidores: "Gente querida: aún estoy 'recalculando' mi energía por lo que pasó ayer en 678. Pero lo vivo sin dramatismo. Pasó, fue un entredicho y a otra cosa. Yo lo quiero mucho a Orlando, sinceramente este episodio en nada afecta el cariño personal. Lo digo de verdad, sin falsa modestia. Tal vez él sintió (en ese clima particular que es un programa de televisión) que algo no estaba bien y quiso ponerlo en evidencia. Equivocado O NO fue su percepción del momento. No tiene mayor trascendencia. Vivimos procesos intensos y trascendentes que nos requieren con fuerza y pasión. En ese esfuerzo argumentativo estamos embarcados".

Es interesante ver hasta qué punto el fanatismo que 678 pregona día a día se vuelve palpable horas después de peleas como esta. Puede leerse en los comentarios de los fanáticos de García, que hasta hicieron correr una foto de ella por FB con la leyenda "¡¡¡Aguante morocha!!!", una frase recurrente a la hora de defender a CFK. Senil, gagá, maleducado, su tiempo terminó, y hasta hubo algunos que recordaron que trabajó en Clarín durante la dictadura y luego en La Nación durante largo tiempo. Así, los fanáticos hacen suyo el lenguaje de los opositores al programa y hablan como ellos.

A partir de ahora estarán los que apoyen a Barone por un lado y los que banquen a García por el otro, en ese esquema binario de amigo/enemigo que el programa oficialista tanto disfruta, y siguiendo una máxima peronista de Evita, que una vez dijo: "Tenemos que convencernos para siempre: el mundo será de los pueblos si los pueblos decidimos enardecernos en el fuego sagrado del fanatismo".

Sin embargo, ese contrapunto encubre otra cosa a develar. Lo más fascinante de la discusión que es muestra dos culturas, ambas K, en choque, algo que, según los conceptos de Raymond Williams, podríamos denominar lo residual (Barone) en tensión con lo emergente (García). "Residual" se define a todo aquello que se formó en el pasado pero aún sigue activo en el marco de la cultura dominante. Por contraposición, lo "emergente" supone nuevos significados, valores y prácticas que se van asentando en lo dominante.

Así, Barone podría ser leído como el viejo PJ que sigue formando parte del aparato oficialista y Cynthia García como la representante más cabal de la renovación que comprende La Cámpora. Si chocan en la política pura y dura, como no van a hacerlo en la pantalla. Después de todo, somos homo videns

Adio!

miércoles, septiembre 05, 2012

Elogio a Paco Cambiasso

Duro de Domar ya no es lo que era. Aquel programa irreverente que hablaba de televisión y política sin ningún tipo de bandera dio paso a un ciclo oficialista, teñido de un sesgo kirchnerista, sobre todo en las opiniones de sus panelistas y conductor, Daniel Tognetti. Eso, aclaro, no es malo, sin embargo rompió aquel contrato de lectura que tenía con sus televidentes, a los que nos gustaba ver el DDD para cagarnos de risa un rato sobre lo que pasa en el mundo de la "caja boba".
Hoy, solo quedan algunos espacios que hacen honor a la fórmula que hizo famoso al programa: "TV compacta" es uno. Pero el más elogiable es el sketch de Paco Cambiasso, una grata revelación que hace humor negro con distintos tipos de personajes públicos. El episodio de ayer fue un ejemplo de ello. Un Paco Cambiasso sin filtro con el que no pude parar de reírme y decir "no pueden ser tan hijos de puta".
Un grato hallazgo humorístico en medio de un programa "militante", como la mayoría de los producidos por Diego Gvirtz.
Bienvenido sea a la TV argentina, Paco Cambiasso.



Adio!