Crítica: DVD
“La crueldad es uno de los placeres más antiguos de la humanidad."
Friedrich Nietzsche
"Toda vida es sufrimiento."
Arthur Schopenhauer
“Oh, si, va a haber sangre”. Con esta frase se presenta el “El juego del miedo II”, secuela de la exitosa película que supo movilizar a los fanáticos del terror hacia los cines de todo el mundo, con esa mística tan particular que sólo los baños de sangre chorreando, las auto-amputaciones y las mutilaciones al por mayor pueden conseguir.
Siguiendo la esencial del primer film, el joven director Darren Lynn Bousman (de sólo 25 años), le imprime a la cinta una estética propia de los videos de MTV más darks y satánicos, y el montaje de planos a velocidad súper-rápida, obra de Kevin Greutert, esta hecho al estilo Marilyn Manson.
Que comience el juego (otra vez)
Tras una misteriosa y sangrienta muerte con la indeleble marca del asesino serial Jigsaw (Tobin Bell), el detective Eric Mathews (Donnie Wahlberg) recibe un mensaje personal para que observe de cerca lo que hace. La policía encuentra el refugio del “rompecabezas” pero ha sido demasiado tarde.
Un grupo de personas, entre los que se encuentra el hijo del detective Mathews, Daniel (Erik Knudsen), despiertan encerradas en una oscura y asquerosa casona abandonada, sin saber como llegaron a ese lugar. El espacio, perfecto para que se desarrolle el juego del miedo, se transformará en un laberinto de trampas mortales donde la puerta de salida se abrirá a las 3 horas. El problema: un límite de tiempo de 2 horas antes de que el químico mortal que respiran los mate.
Para sobrevivir los participantes deben encontrar las jeringas con el antídoto que están diseminadas por diferentes lugares de la casa. Esa es su misión. Entre los ocho participantes, Amanda (Shawnee Smith) conoce el macabro juego, ha participado antes, pero fue apresada nuevamente por no cuidar su vida. Cortarse las venas = no querer vivir.
Con el correr de los minutos, el pánico crece y el número de personas disminuye. El deterioro físico es notable, la paranoia complica la cooperación entre los participantes, que también pueden salvarse si descubren que tienen en común, lo que les dará la combinación a la caja fuerte donde hay suficiente antídoto para todos.
“Los que no aprecian la vida que le ha sido dada, no la merecen”, sentencia Jigsaw ante el detective Mathews. Su verdadero nombre es John que, tras un fallido intento de suicidio después de haber sido diagnosticado con cáncer, se ha propuesto pasar el resto de sus días testeando la naturaleza humana”.
Secuela del miedo
“El juego del miedo II” repite la exitosa fórmula de la primera parte, basada en un suspenso a contrarreloj teñido de grandes cantidades de sangre. La película juega con el tiempo constantemente, tanto a través de flashbacks como recuerdos, la historia siempre vuelve sobre sí misma para desmenuzar la enredada trama de este ludo del horror.
Los efectos especiales son excelentes, todo se ve muy natural, y resultan imprescindibles como en toda película de terror con tendencia splatter (exceso de sangre, fluidos del cuerpo y pequeños trozos de carne por todos lados).
David Armstrong, director de fotografía, plasma un escenario impecable a través de ambientes poco iluminados, desprolijos, caóticos, húmedos y muchos planos a contraluz. La música, a cargo de Charlie Clouser, tensa aún más las situaciones extremas y sumerge al espectador en la trama. Buena película, con un sólido guión, un ejemplo de terror.
Ficha Técnica
Siguiendo la esencial del primer film, el joven director Darren Lynn Bousman (de sólo 25 años), le imprime a la cinta una estética propia de los videos de MTV más darks y satánicos, y el montaje de planos a velocidad súper-rápida, obra de Kevin Greutert, esta hecho al estilo Marilyn Manson.
Que comience el juego (otra vez)
Tras una misteriosa y sangrienta muerte con la indeleble marca del asesino serial Jigsaw (Tobin Bell), el detective Eric Mathews (Donnie Wahlberg) recibe un mensaje personal para que observe de cerca lo que hace. La policía encuentra el refugio del “rompecabezas” pero ha sido demasiado tarde.
Un grupo de personas, entre los que se encuentra el hijo del detective Mathews, Daniel (Erik Knudsen), despiertan encerradas en una oscura y asquerosa casona abandonada, sin saber como llegaron a ese lugar. El espacio, perfecto para que se desarrolle el juego del miedo, se transformará en un laberinto de trampas mortales donde la puerta de salida se abrirá a las 3 horas. El problema: un límite de tiempo de 2 horas antes de que el químico mortal que respiran los mate.
Para sobrevivir los participantes deben encontrar las jeringas con el antídoto que están diseminadas por diferentes lugares de la casa. Esa es su misión. Entre los ocho participantes, Amanda (Shawnee Smith) conoce el macabro juego, ha participado antes, pero fue apresada nuevamente por no cuidar su vida. Cortarse las venas = no querer vivir.
Con el correr de los minutos, el pánico crece y el número de personas disminuye. El deterioro físico es notable, la paranoia complica la cooperación entre los participantes, que también pueden salvarse si descubren que tienen en común, lo que les dará la combinación a la caja fuerte donde hay suficiente antídoto para todos.
“Los que no aprecian la vida que le ha sido dada, no la merecen”, sentencia Jigsaw ante el detective Mathews. Su verdadero nombre es John que, tras un fallido intento de suicidio después de haber sido diagnosticado con cáncer, se ha propuesto pasar el resto de sus días testeando la naturaleza humana”.
Secuela del miedo
“El juego del miedo II” repite la exitosa fórmula de la primera parte, basada en un suspenso a contrarreloj teñido de grandes cantidades de sangre. La película juega con el tiempo constantemente, tanto a través de flashbacks como recuerdos, la historia siempre vuelve sobre sí misma para desmenuzar la enredada trama de este ludo del horror.
Los efectos especiales son excelentes, todo se ve muy natural, y resultan imprescindibles como en toda película de terror con tendencia splatter (exceso de sangre, fluidos del cuerpo y pequeños trozos de carne por todos lados).
David Armstrong, director de fotografía, plasma un escenario impecable a través de ambientes poco iluminados, desprolijos, caóticos, húmedos y muchos planos a contraluz. La música, a cargo de Charlie Clouser, tensa aún más las situaciones extremas y sumerge al espectador en la trama. Buena película, con un sólido guión, un ejemplo de terror.
Ficha Técnica
Título original: “Saw II”
País: Estados Unidos
Director: Darren Lynn Bousman
Actores: Donnie Wahlberg, Shawnee Smith, Tobin Bell, Franky G, Glenn Plummer y Dina Meyer
Director de fotografía: David Armstrong
Guionista: Darren Lynn Bousman y Leigh Whannell
Montaje: Kevin Greutert
Música: Charlie Clouser
Duración: 93 minutos, apta para mayores de 16 años
Adio!